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Lo unipersonal de la virtualidad

social media

La nueva masa en el enjambre digital

En la última década, la sociedad actual viene haciendo una gran transición gracias a la revolución digital desatada a partir de la segunda guerra mundial. Es por ello que, ahora, estamos viviendo la nueva masa en el enjambre digital – ustedes se preguntarán: ¿qué es esto del enjambre digital o a qué hace referencia? – este concepto se refiere a los individuos aislados, que no constituyen ningún ‘nosotros’, sino que, se unen detrás de la pantalla a opinar junto a otros acerca de x o y coyuntura actuando de manera unipersonal en la virtualidad, sin embargo no hay un espíritu o un alma como tal que una este conjunto social.

Como consecuencia, la conocida manera de relacionarse visualmente, prestando atención a la cara o a la mirada; transmitiendo, comunicando físicamente está dejando de ser. Pues esta presencialidad se va desvaneciendo desde el momento en que nos convertirnos en seres virtuales, en el que se desmonta lo real y reina lo imaginario en la virtualidad.

Van desapareciendo detalles como: la voz, el tono que aprueba o desaprueba, ya que de ahí se puede deducir y saber en qué momento se encuentra el otro individuo, el lenguaje corporal, gestos, expresión de la cara, ademanes, que son los que dan la capacidad de comprender al otro. Terminamos creando una imagen irreal de los demás o la que asociamos de alguien que tiene características similares a nosotros.

Nuevas formas de comunicación

Entonces, sucede que el núcleo de la comunicación, como se conoce, trasciende en otras representaciones comunicativas digitales, generando la ausencia del otro; y que, a su vez, el medio digital se hace fuerte, está por encima, al punto que nos aleja los unos de los otros. Así que, con fascinación se le da lugar al teléfono inteligente, quien en repetidas ocasiones hace de espejo, el cual nos ayuda a recrear situaciones y la vida que, en apariencia, nos gustaría vivir.

En ese mundo hacemos realidad la necesidad de sentirnos bellos u obtenemos la aceptación de las masas digitales a través de la pantalla. Es allí, donde nacen un sinfín de situaciones, aparecen deseos, todo es a un clic de distancia, todo es tan cercano y posible … pareciera que la vida es más fácil, positiva y feliz.

representaciones comunicativas

Sin embargo, al convertirnos entes netamente digitales y acostumbrarnos a que nuestra vida gire alrededor de las redes sociales, inevitablemente se termina siendo seres unipersonales sumergidos en la virtualidad. Pues, como bien sabemos, la tecnología en nuestras vidas a tomado un protagonismo único, nunca antes visto, que el uso extenso y excesivo ha conllevado al que la sociedad sea generadora de inmediatez digital, permanecer conectados 24/7 y que ahora la forma de relacionarse está condicionado a que suceda a través del Smartphone. Entonces – me pregunto: ¿Qué pasará con quienes no están en las redes sociales?

Nos hemos trasladado a uno único, personal e individual gracias a la social media
unipersonal

¿Hasta dónde nos ha llevado la modernidad?

Nos encontramos un punto importante y a su vez crítico teniendo en cuenta el impacto tan profundo que han tenido las nuevas tecnologías en la sociedad y cómo afecta directamente la coyuntura actual. Entonces, como lo he planteando durante todo el texto, la era digital no solo nos encanta por todas las facilidades, habilidades por descubrir, explorar el mundo y demás.

Sino que, además hemos llegado al punto que, tanta saturación y simpleza para encontrarlo todo, aparece lo que se conoce ahora como tecnoestrés: una enfermedad de adaptación causada por la alta habilidad para tratar las nuevas tecnologías de manera saludable o infoxicación: la adicción al uso de las TIC, ya que estas generan una sensación de necesidad constante en la virtualidad.

tecnoestrés

Replantearnos ..

Entonces, a modo de reflexión, la lucha no es solo con nosotros mismos, sino con la misma sociedad que todo el tiempo exige que seamos lo más tecnológicos posibles, cosa que no está mal, pero debemos encontrar un equilibrio mental y emocionalmente saludable. Es bien sabido que, nuestras acciones son fortalecidas mediante aspectos motivacionales intrínsecos e incentivos provenientes del entorno en ambientes reales no virtuales.

La socialización en familia y amigos genera una interacción importante que implica comunicación, expresar sentimientos y enfrentarse a situaciones de triunfo o de fracaso. Aunque nos parezca pasado de moda o que nadie lo usa, no es así; los buenos valores, las buenas relaciones y el compartir con los demás, un abrazo, un beso, siempre serán de mayor gratificación para alma. Cultivémonos como humanidad y dejemos la individualidad.

Pequeños hábitos pero saludables:

  • Crear tiempos de pausa
  • Definir horarios de no uso, por ejemplo, a la hora del almuerzo
  • Controlar el tiempo en algunas aplicaciones
  • Desconectarse 1 hora antes de dormir – la luz del celular o pc dificulta conciliar el sueño
más humanidad

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1 comentario en “Lo unipersonal de la virtualidad”

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